XABIER PEREZ HERRERO

IRUN

EL PSOE EN LA ENCRUCIJADA

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Tras el brutal declive electoral que viene padeciendo y la subsiguiente espantada de Rubalcaba, el viejo partido se plantea las primarias en las que se encuentra inmerso como una especie de bálsamo de Fieragrás que vale para todo y todo lo cura. No soy en absoluto seguidor de este partido, pero me he tomado la molestia de estar atento a lo que acontece en él porque sus derivadas sí acabarán por afectarnos a todos. En primer lugar, me llama la atención el apodo que dentro de la militancia (tengo una conocida en las JSE que me suele contar algunas interioridades) se ha colocado a los candidatos en cuestión: «Pedro el Guapo», «Edu el Formal» y «Antonio, el de Izquierda». Esta joven, sinceramente progresista, me decía que en vez de un secretario general para un partido en caída libre parece que fueran a elegir al yerno ideal para una hija. Y es que «Antonio, el de Izquierda» no deja de ser el típico militante histórico de ese cuarto trastero llamado Izquierda Socialista, en el que se arrumban las personas que siguen siendo progresistas en un partido hace tiempo orientado hacia el centro-derecha.

El pseudodebate que han mantenido, pellizcos de monja incluidos, no ha hecho sino confirmar la absoluta vacuidad de los planteamientos sociopolíticos de «el Guapo» y «el Formal», sobre todo al realizarse la comparativa in situ con Pérez-Tapias, «el de Izquierda». Nada, ni siquiera la ahora autocriticada reforma-expréss constitucional del Art. 135 (pagar la deuda antes que cualquier gasto social, por acuciante que sea) ha ocasionado compromiso alguno de intento de revocación. Mucho me temo que por este camino el PSOE siga el destino del PASOK griego y que sus más de 100 años de historia acaben por ser sólo eso, Historia.