SUCEDIO EN BUENOS AIRES

Carrera de atropellos Ayer me pasó algo ruin, y digo "me pasó" porqué uno crea las condiciones de posibilidad para que te transversalizen cosas que podrían ser ajenas ante la propia omisión, nada más ver y seguir y justificarse con la popular excusa "este no es mi problema". Salí de CTA y me fui caminando por 9 de julio para Constitución, los ciudadanos estaban más desagradables y mezquinos que todos los días, llovizna y audífonos, la gente se apuraba no sé bien porqué, una letanía oficial estuvo presente todo el día, " no nos quieren en Brasil porqué somos mejores”La mierda de siempre!!! Llegando a Estación Constitución, una zona que muestra las miserias itinerantes que se mueven rápido como un cardumen de peces, en muchedumbre, para subir a los trenes que los trasladan hacia la provincia a horas pico, cuándo voy a cruzar, tres pibes que están siempre ahí, oliendo pegamento de contacto en bolsa , le arrebatan una cartera a una mujer prolijamente vestida, cuándo iba a subir a un coche y cerraba su paraguas. Uno de ellos, adolescente, corre por detrás de un colectivo y observo, sin dudas, que un coche lo atropella premeditadamente, su cuerpito desnutrido se dobla por encima del capot del auto nuevo, cae contra el cordón, resbala y trata de levantarse y la sangre brota de su boca, lo veo clarito, sangre negra, arterial, los ojos como un animal de matadero, el coche azul que se da a la fuga, no así la señora que junto a su marido-supongo yo- un gordo corpulento y pelado, comienzan a golpear al pibe en el suelo, y otros "ciudadanos" solidarios se suman al linchamiento, el cuerpo del pibe parecía un judas, se movía por los golpes, sin signos vitales, cuatro policías de la Federal, que también están siempre ahí, y que le cobran peaje  a los pibes por sus robitos, a las putas por la parada y esquilman a los vendedores ambulantes, permanecían inmóviles. Hubiera deseado que eso no pasara delante de mi vista, y en consecuencia, no hubiera existido, pero atropello para la mitad de los carroñeros y tiro al gordo, me cayeron golpes de todos lados, la señora era la que más se ensañaba y me golpeaba con su paraguas en la cabeza ,me pegaron una patada por la espalda y me caí al piso, me paro con dificultad y me siguen golpeando, la señora encabeza las iras propietaristas de los ciudadanos indignados, entonces caen los policías, la hostilidad decrece, pero intentan detenerme a mí, llega un patrullero, me quieren esposar por desacato, él pibe sigue inmóvil y una muchedumbre de mirones con ojos de ovejas imbéciles queda paralizado, pierden inexplicablemente el vértigo por subir  primero al tren o a los colectivos repletos, y observan con morbosidad, ese espectáculo circense, un sargento rapado y con lentes negros baja del patrullero, y dice "ese ciruja está boleta" me pide los documentos, me los retiene y me dice, "los pasa a buscar mañana por la  21 y le tomamos declaración", llega una ambulancia, suben el cuerpo como una bolsa de papas, sin bajar la camilla y debí de soportar la reprimenda del sargentito " ¡ y a vos que te calienta viejo?, es una lacra menos!!!". Me vine caminando bastante humillado hasta casa, sintiendo vergüenza de pertenecer al género humano, pero me siento, en todas mis omisiones y mis malas acciones mejor que esos ciudadanos, no es gran cosa, pero al llegar me invadió una angustia tan grande, y me dormí hasta la una de la mañana, tuve algunos sueños agradables como si me fuera a morir en esos sueños y no en vida, como la noche posterior de  la muerte de mamá, me sentí huérfano otra vez y vi el cuerpo del pibe en dos actos, la pirueta por el aire y la sangre, y pensé en los ciudadanos, buenos padres, buenos patriotas, que festejaron el día anterior su doble condición de pertenencia a esta mierda y permanecí despierto unas horas, a las siete de la mañana me fui a la comisaría, me hicieron esperar media hora, me tomaron una declaración sumarial, respondí con impaciencia -porque se metió en eso, que le importaba?- me preguntó el oficial de guardia -no lo sé, será por mis hijos - le dije, sin querer desafiarlo ni discutir nada, sólo quería mi documento y huir rápido, pero le pregunté... el pibe, cómo está? -murió a las dos y media de la mañana en el Moyano, anemia aguda y muerte cerebral, "lo que le quedaba de cerebro al ciruja! dijo con ironía -que edad tenía le pregunté - 14 años, de Villa Soldati, 3 años de reformatorio, familiares no ubicables, Cristian Rojas, los datos para una estadística ciudadana olvidable ,y su ausencia  para siempre, que pasará desapercibida para el embrutecimiento cotidiano El Bomba Pallás postaporteñ@ 1205 - 2014-07-16