¿OCULTA LA CASA REAL DATOS SOBRE EL ESTADO DE SALUD DEL MONARCA?
El Rey se negó a entregar su ficha médica en la última Cumbre Iberoamericana
El Rey, con magulladuras en el rostro tras el "accidente doméstico" sufrido el pasado martes.
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La Casa Real se saltó las reglas de seguridad y protocolo de la última Cumbre Iberoamericana, celebrada el pasado mes de octubre en Asunción, y ocultó a las autoridades paraguayas los "datos relevantes del estado de salud" del rey Don Juan Carlos, según han confirmado a El Confidencial fuentes oficiales del Gobierno de aquel país. La entrega de la ficha médica de todos los mandatarios asistentes a la 21ª edición de la cumbre era un requisito obligatorio para garantizar la atención sanitaria inmediata de aquéllos en caso de emergencia.
Las especulaciones acerca del estado de salud del monarca, alimentadas por la opacidad de la Casa Real sobre un asunto que se considera secreto de Estado, se dispararon tras la intervención quirúrgica a la que fue sometido en mayo de 2010 en el Hospital Clínico de Barcelona para extirparle un nódulo en el pulmón derecho. Pese a que oficialmente se aseguró entonces que el tumor detectado no era maligno, la operación desató las alarmas en la opinión pública, ya que apenas dos semanas antes el Rey había pasado con total éxito, según informó La Zarzuela, su habitual chequeo anual.
La decisión de la Casa Real de ocultar la ficha médica del Rey al comité organizador de la Cumbre Iberoamericana tampoco contribuye a disipar las crecientes dudas sobre su estado de salud. El Manual Operativo de la cumbre, elaborado por las autoridades paraguayas y consensuado con las delegaciones de todos los países participantes, incluye un apartado en el que, bajo el epígrafe Fichas médicas, se afirma: "Los datos relevantes del estado de salud de los jefes de Estado y de Gobierno deberán ser remitidos a la Coordinación Ejecutiva para su adecuado tratamiento y previsión. La información de referencia recibirá un tratamiento de estricta confidencialidad".
Flagrante incumplimiento
Fuentes del Gabinete de Coordinación Ejecutiva y de la Secretaría de Coordinación de la cumbre de Asunción confirmaron a El Confidencial que la Casa de Su Majestad el Rey, a diferencia del resto de delegaciones, no entregó a las autoridades paraguayas la ficha médica de Don Juan Carlos, como era preceptivo, pero aseguraron desconocer las razones de ese flagrante incumplimiento de las normas de seguridad. Según el Manual Operativo, todas las actividades de la cumbre contaron con "el apoyo de unidades ambulatorias independientes", dotadas con "personal capacitado para rescate, estabilización y traslado en caso de emergencias".
El responsable de Comunicación de la Casa Real, Ramón Iribarren, reconoció a este diario que La Zarzuela no entregó el historial médico del Rey al comité organizador de la cumbre, circunstancia que atribuyó a que el equipo de facultativos que atiende habitualmente al monarca en su residencia oficial "olvidó rellenar la ficha médica" de Don Juan Carlos. Iribarren aseguró que éste viajó a la capital paraguaya acompañado de su equipo médico de confianza, y añadió que, en cualquier caso, el jefe del Estado "goza de un buen estado de salud, más allá de ciertas dificultades para caminar o subir escaleras".
El Rey, sin embargo, ha pasado al menos dos veces por el quirófano en los últimos cinco meses. A primeros de septiembre fue intervenido de una rotura en el tendón de Aquiles de su pie izquierdo; y en junio fue operado de la rodilla derecha, en la que se le implantó una prótesis para compensar el desgaste articular que padecía desde que en 1991 sufrió una rotura de la tibia mientras practicaba el esquí.
El episodio más reciente se produjo el pasado martes, cuando Don Juan Carlos apareció en un acto oficial con un fuerte hematoma en su ojo izquierdo y magulladuras en la nariz, que La Zarzuela atribuyó a "un pequeño accidente doméstico". Según esa versión oficial, el Rey se disponía a abrir una puerta del palacio cuando un ayudante hacía lo mismo en sentido contrario y le golpeó en la cara. Más sorprendente fue lo ocurrido el pasado 7 de marzo durante la recepción oficial en el palacio de El Pardo al presidente de Chile, Sebastián Piñera: el monarca lucía también un ojo morado -de nuevo el izquierdo-, que la Casa Real atribuyó a un "efecto óptico".
Menos viajes... oficiales
Los problemas de salud del Rey le han obligado a recortar su agenda en los últimos meses y limitar al máximo sus viajes al extranjero, al menos los oficiales. La Casa Real informó el pasado día 7 de que Don Juan Carlos suspendía su agenda de trabajo por consejo médico a causa, según la versión oficial, de una sobrecarga en su tendón de Aquiles operado. Sin embargo, el monarca viajó en esa misma fecha al Golfo Pérsico en visita privada: primero a Kuwait, invitado por el jeque Sabah al Ahmad, y luego a Emiratos Árabes para asistir al Gran Premio de Abu Dhabi de Fórmula 1.
Hasta la coalición de la izquierda abertzale Amaiur, que tendrá siete diputados en el Congreso en la próxima legislatura tras los buenos resultados obtenidos en las pasadas elecciones, ha asegurado que preguntará al Rey por su salud porque "parece bastante precaria", según dijo el pasado lunes su dirigente Pernando Barrena. Don Juan Carlos recibirá en las próximas semanas a Amaiur dentro de la ronda de contactos que mantendrá con todos los grupos parlamentarios.
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