Caminando por Once a las cinco de la tarde

rápido rápido

que hacen esos piojosos

envueltos en mantas

tirados sobre alcohólicos colchones

obstruyendo la marcha

flotando a la deriva de la tarde

rápido rápido caminen más rápido

que se va el tren

saquen del paso ese kiosco de quimeras

que no estaba anteayer

quién fue el imbécil

que puso en la vereda esa pila de fábulas de trapo

a ver si salen de ahí

y se mete cada cual en su negocio

se apuran o se mueren

que el tren de 17 y40 está al partir

déjenme pasar vamos vamos

quién fue el hijo de puta

que tiró esa cáscara de lágrima

uno se resbala y cae sin pensarlo

por culpa de cualquiera

sobre un charco de penas chapuceras

los mataría a todos

vamos rápido rápido más rápido

que si pierdo ese tren

me arrastrará la corriente

de este río de mecánicas hormigas

apártense carajo

que el tren de la vida se me escapa

a ver si me dejan pasar

que tengo el tiempo justo

Un abrazo
Roberto Rapalo