El Presupuesto 2017: ¿Pesada herencia? No, pesado presente y pesado futuro
La Comisión de Presupuesto de la Cámara de
Diputados abrirá el próximo martes el debate del Presupuesto Nacional
para 2017. Sobre el proyecto enviado por el gobierno nacional opinó para
Télam el ex ministro de Economía y diputado nacional por el Frente para
la Victoria-PJ, Axel Kicillof.
Por Axel Kicillof (*)
Empecemos por el principio. A poco de asumir el gobierno de Macri anunció, a través de su Ministro de Hacienda, cuáles eran las metas para este año, 2016. ¡Le pifió en todo!
Según Prat Gay en 2016 el crecimiento del PIB iba a ser del 1%, la inflación del 25%, y el déficit fiscal se iría reduciendo paulatinamente. Con el proyecto de ley de Presupuesto en nuestras manos podemos comparar esas estimaciones con la realidad del año en curso y también con lo que ocurrió en 2015. Son todos números oficiales.
Empecemos por el crecimiento PIB. En lugar de crecer 1% como habían prometido, este año, se estima una caída de 1,5%. Para muchas consultoras la caída será mayor todavía: cercana al 2%. Hay que tener en cuenta, a los fines de comparar, la "pesada herencia": en 2015, según reconocen en el presupuesto, el PIB se expandió un 2,4%. Es decir, la economía estaba en crecimiento y ahora está en recesión, como muestran todos los indicadores.
Pasemos al déficit fiscal. Según los datos oficiales del Ministerio de Hacienda, el déficit en 2015 utilizando la "metodología" inventada por Prat Gay -que resta las transferencias del Banco Central- fue de 4,3% del PIB. En el presupuesto se estima el déficit de 2016 con el mismo método y será ¡de 4,8% del PIB!.
Crece el déficit fiscal, fundamentalmente porque redujeron los impuestos a los sectores más concentrados como mineras, sojeras, grandes exportadores, capital financiero.
En cuanto a la inflación, habían pronosticado un 25% y Macri había prometido todavía menos: 20%. La realidad es muy distinta: en los 8 meses que van del año, el IPC de la Ciudad de Buenos Aires (PRO) marcó un incremento de precios del 31%.
Comparemos con 2015. Según la misma fuente en los primeros 8 meses del año pasado la inflación acumulaba 16%. En lo que va del año Macri la duplicó. Pese a que en campaña aseguraba que controlar la inflación era "lo más fácil de hacer".
Para todo el año 2016 se espera una inflación de 42%. Mientras tanto, los salarios crecerán entre 20% y 30%, las jubilaciones 30% y lo mismo la AUH. En el primer año del "cambio" se perdió un mínimo de 10% en el poder adquisitivo.
No fue magia. Lo que ocurre es que el gobierno de Macri está aplicando un programa económico neoliberal. Represión salarial, apertura comercial y financiera, tarifazos, endeudamiento externo, destrucción del mercado interno.
El resultado de estas políticas es siempre el mismo: recesión y exclusión social.
El gobierno venía negando también las consecuencias de sus políticas: Macri vetó la ley anti despidos porque, según él y sus ministros, no había ningún despido.
Hoy reconocen 120.000 sólo en el sector formal.
El proyecto de presupuesto plantea, para el año que viene, más devaluación (20%), una inflación del 17% y una "pauta salarial" del 18%.
De los 10 puntos de salario perdidos, ni noticias.
(*) Diputado nacional por el Frente para la Victoria-PJ y ex ministro de Economía.
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