Al ministro José Ignacio Wert le crecen los artistas contra su política cultural: la fotógrafa Colita renuncia al Premio Nacional de Fotografía que le fue concedido ayer porque “su fotografía siempre se encuentra humor, inteligencia e ironía”. Los motivos los ha dado en una carta dirigida al ministro: “La situación de la cultura y la educación en España es de pena, vergüenza y dolor de corazón”, escribe la artista clave en la Barcelona de los años sesenta y setenta. La renuncia de Colita se suma a la de la semana pasada de Jordi Savall, que rechazó el Premio Nacional de Música y también a los 30.000 euros de dotación.