El periódico israelí Haaretz reveló que el presidente ruso, Vladimir Putin, detuvo una inminente guerra entre Israel e Irán, con una llamada telefónica, tras los recientes enfrentamientos. Este fin de semana Israel derribó un dron iraní sobre los territorios palestinos ocupados y luego un caza F-16 israelí fue derribado en Siria.
El periódico describió la llamada entre Putin y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el domingo por la noche, como “decisiva y fatídica, ya que de inmediato detuvo el enfrentamiento”.
El periódico concluyó que el presidente ruso había proporcionado una solución aceptable a ambas partes, según la traducción de Arabi21.
El periódico también declaró que los ataques israelíes contra objetivos en Siria preocuparon a Moscú, ya que se habían dirigido a lugares cercanos a las áreas de difusión de asesores rusos, especialmente en la Base Aérea Militar Tiyas (Base Aérea T-4) en el campo oriental de Homs.
El periódico concluyó que la estabilidad que ha prevalecido en la región tras la conversación telefónica entre Putin y Netanyahu reveló nuevamente la verdadera toma de decisiones en Oriente Medio. El periódico enfatizó que Rusia decide cómo deberían ser las cosas en la región, mientras que Estados Unidos sigue siendo un partido “ausente-presente” en los diferentes escenarios.
Según una declaración emitida por el Kremlin, tras la conversación telefónica del sábado, Putin pidió a Netanyahu que se abstuviese de tomar medidas que pudieran conducir a nuevos enfrentamientos en la región.
El embajador israelí en Moscú ha pedido a Rusia y Estados Unidos que intervengan con urgencia para contener la situación y evitar que Siria se convierta en “un puente por el cual Irán pase (a Israel)”.
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