España cae en el ránking: pasa 

de la 8º a la 14º economía del mun

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España, que llegó a colocarse como la octava potencia mundial antes de la crisis, se sitúa ahora en el decimocuarto puesto, lo que supone una caída de seis posiciones, según los cálculos realizados por EXPANSIÓN a partir de las nuevas previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI). Unos pronósticos que reflejan los duros efectos de la peor recesión de la historia reciente de España, que no logra remontar en el gran ránking de riqueza pese a ser una de las potencias avanzadas que más ha crecido durante el último año.
En concreto, los datos muestran que España fue la octava economía en 2007, al igual que había sucedido en 2003 y en 2004. En los años intermedios y en los inmediatamente anteriores y posteriores a esos ejercicios se despidió de esa cima, pero sin perder demasiado brillo: hasta 2009, España logró siempre mantenerse dentro del top ten mundial. Fue a partir de 2010 cuando comenzó el verdadero declive, con ese descenso progresivo que le dejará hasta al menos 2021 en la 14º posición.

Deterioro desde primavera

Esta nueva clasificación supone un notable deterioro respecto a lo que sucedía hace sólo medio año, pues en primavera las previsiones del FMI eran más generosas con España. Entonces, el organismo esperaba que el país, con un PIB de 1,252 billones de dólares, abandonase la 14º posición para escalar dos puestos, hasta el 12º, adelantando a Rusia y Australia. Pero, según los nuevos pronósticos, ese sorpasso finalmente no será posible, con lo que esas dos potencias quedarán por delante de España a largo plazo. Así, Rusia es la 12º economía y Australia, la 13º.
En 2007, la situación era muy distinta. España, desde su octava posición, rebasaba a esos dos países y también estaba por encima de India (que ahora es 7º en el ránking), Brasil (hoy 9º), Canadá (10º) o Corea (11º).

La otra medición

Esta clasificación es la realizada en función del PIB en dólares corrientes, que es popular en diversos análisis económicos y la empleada en la arena política. Es, en concreto, la que usaba el Ejecutivo cuando proclamaba la entrada de España en la Champions League económica en 2007.
Sin embargo, esta medición no es la más rigurosa, dadas las distorsiones generadas por los distintos niveles de precios de cada potencia. Para filtrar ese efecto, se usa el cálculo en paridad de poder de compra, menos sensible a las variaciones de los tipos de cambio.
Con este baremo, España, con un PIB de 1,689 billones de dólares, también muestra una pérdida progresiva de influencia, pues pasa del 12º puesto previo a la crisis a la 15º. Aunque no todo son malas noticias, pues en esta lista España adelanta este año a Canadá, con lo que mejora una posición respecto a 2015, cuando era el 16º.